En algún momento de nuestra vida los dientes de cualquiera de los dos maxilares nos han dolido. Nos tememos lo peor, que es ir al dentista. Pues bien, aunque tengamos que visitar al médico estomatólogo nosotros podemos, de forma manual,
aliviar esas molestias por no decir el dolor de dientes simplemente haciéndonos unas presiones en los dedos de las manos o de los pies.